7 Amenazas Contra el Sistema Inmunológico

Los cambios del clima, el incremento de los niveles de contaminación, entre otros factores, están volviendo más vulnerable al sistema inmunológico. Como estamos expuestos siempre a estos factores, resulta importante identificarlos y enfrentarlos.

El sistema inmunológico es la defensa del cuerpo ante microorganismos infecciosos o sustancias tóxicas. Mediante una serie de pasos llamados “respuesta inmune”, este sistema ataca a los microorganismos y a las sustancias que invaden los sistemas del cuerpo y causan las enfermedades.

Hay factores negativos que se pueden controlar, los mencionamos a continuación:

1. Dormir pocas horas

El cuerpo requiere de un mínimo de siete horas de sueño diariamente. El sueño refuerza la respuesta inmune innata, que constituye la primera línea de defensa antes los microorganismos infecciosos. Además, durante el sueño aumenta la memoria inmunológica, que es la capacidad del organismo de defendernos ante una infección futura.

2. Una mala alimentación

No tener una alimentación balanceada afecta la cantidad de leucocitos, células indispensables para la defensa del cuerpo. Es importante contar con vitaminas A, B6, C, E, D y minerales como el zinc, el selenio y el hierro.

En la dieta diaria se deben incluir frutas, verduras, nueces, semillas y productos con un buen aporte nutricional. Se debe evitar el consumo excesivo de grasas porque puede afectar el balance de la microbiota intestinal.

3. Tener altos niveles de estrés

Poseer mucho estrés debilita el sistema inmunológico rápidamente y disminuye su efectividad para combatir los microorganismos infecciosos. Principalmente está vinculado con enfermedades cardiacas, estomacales y dermatológicas (de la piel). Es importante eliminar la fuente del estrés o encontrar medidas para contrarrestarlo, como la realización de deportes, yoga o alguna actividad de interés.

4. Fumar

La nicotina de los cigarros convencionales no sólo produce adicción, sino que también debilita el sistema inmune. Los cigarrillos electrónicos, además de poseer nicotina, poseen otras sustancias que también afectan este sistema.

El consumo de cigarrillos no sólo tiene impacto negativo sobre la inmunidad, sino que también afecta a los sistemas respiratorio y digestivo, lo que puede producir otras enfermedades o agravar el curso clínico de las preexistentes.

Ciertos componentes de los cigarrillos alteran el barrido ciliar (sistema de eliminación de partículas y microorganismos en el epitelio respiratorio), aumentan la secreción de moco, dañan directamente las células epiteliales y disminuyen el reflejo protector de la tos.

5. El abuso del alcohol

El consumo de alcohol de forma frecuente o en exceso tiene un impacto en las defensas del cuerpo. Esta sustancia debilita el sistema inmune y hace que el cuerpo sea más propenso a las infecciones. Asimismo, provoca que las bacterias crezcan en exceso en el intestino, permitiendo que después puedan migrar y causar daños en otros órganos.

El consumo excesivo de esta sustancia reduce el número de linfocitos, células encargadas del sistema inmune, y que juegan un papel importante en el reconocimiento y destrucción de organismos infecciosos como bacterias y virus.

6. No hacer ejercicio

La falta de actividad física puede impactar en el flujo de la sangre y las sustancias necesarias para que el cuerpo combata a microorganismos invasores. El ejercicio aeróbico estimula el sistema inmune para que luche contra enfermedades como la gripe.

7. Pasar poco tiempo al aire libre

La luz del sol y las plantas, que se pueden encontrar en parques o bosques, permiten que el cuerpo adquiera energía y produzca sustancias que requiere para fortalecerse. La luz del sol estimula a que las células del sistema inmune actúen de manera más eficiente.

¿Cómo Conseguir Un Sistema Inmune Fuerte?

Algunas recomendaciones para mejorar las defensas de forma natural:

• Seguir una dieta equilibrada, variada y basada en alimentos frescos y ricos en vitaminas y minerales

• Evitar el consumo de tabaco, drogas, alcohol

• Realizar regularmente actividad física de intensidad moderada

• Dormir y descansar bien

• Cuidar nuestros niveles de estrés

• Mantener una actitud optimista y equilibrada

La salud está en nuestras manos. Y tú, ¿cómo cuidas tu sistema inmune?

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